Adoro pasar el tiempo contigo. Me complementas las noches cuando me siento sola, siempre que te necesito estás ahí, leo tu mensaje a la misma hora con la misma ilusion que cuando esto empezó. Al principio, como buenos amigos, tu me ayudaste a superar algunos obstaculos. Luego, después de aquel primer beso hace ahora casi un año, me di cuenta de que mi vida nunca habia estado completa, y que tú eras la pieza de ese ultimo puzzle que me faltaba por encajar. Más adelante. me di cuenta de que no solo eras una pieza más, sino que eras ESA pieza...Que estúpida comparacion, ¿verdad? Bien, pues entonces te diré que, desde hace cais un año, me levanto y me acuesto gracias a ti y cada vez que me besas una sacudida recorre mi cuerpo, como si fuese el primer y el último de nuestros besos.